Sabemos que los llamados hidratos de carbono o glúcidos feculentos, la pasta, el arroz, las legumbres, y en determinadas ocasiones el pan y las patatas deben en general tomarse acompañados siempre de cantidades importantes de verduras para bajar su Índice Glucémico ya que son los más potentes estimuladores de la secreción de insulina.
¡Y tienen además muchas calorías!, la pasta → 373, el arroz → 359, las legumbres → entre las 299 de las alubias y las 343 de los garbanzos y el pan → alrededor de 258 calorías.
Sin embargo nunca hay que eliminarlos del todo pues en pequeña cantidad facilitan la combustión de las grasas y ayudan por tanto a adelgazar.
Pero, en contadas circunstancias hay que moderar su ingesta, principalmente en 6.
1. Si se tiene mucha tendencia a coger peso, es decir se engorda con bastante facilidad.
2. Si se tiende a recuperar facilmente los kilos perdidos de una manera inteligente y saludable, por el tipo de metabolismo de cada uno.
3. Si hay que perder kilos más rápidamente de lo normal porque se va a sufrir una operación inminente.
4. Si los kilos de más se acumulan sobre todo alrededor de la cintura, los famosos “michelines“ o “flotadores”, es decir se tiene la gordura llamada androide, porque la composición de las células grasas o adipocitos de esta zona abdominal es mucho más peligrosa.
Muchos órganos importantes se encuentran localizados en esta parte, como el páncreas que, ante esta cantidad de grasa, se «desorganiza», es decir reacciona muy rápidamente y fabrica demasiada insulina.
5. Si ya se tiene diabetes tipo II, en muchas ocasiones debida principalmente al sobrepeso.
6. Si se atraviesa una época difícil como dejar de fumar, trabajar de noche, empezar con la menopausia, abandonar de repente el ejercicio que se estaba realizando, stress profesional, cambiar de trabajo, problemas afectivos como un divorcio, la pérdida de un ser querido, del trabajo…