En este tercer YouTube de mi canal, Champiñones, hay pocas cosas que corregir, aunque os cuento, como siempre, muchas «cosas».
1. Como era verano los champiñones que yo había comprado para la grabación no eran del todo a mi gusto porque en el sombrerillo tenían alguna manchita parduzca.
Hoy han mejorado muchísimo y suelen estar siempre blancos y sin manchas, por lo menos hay que escogerlos siempre así.
2. Los champiñones fileteados, sin tierra y lavados que utilizo para la segunda parte de la receta ya no se comercializan así, porque si os fijáis en el envase, están todavía más oscurecidos que los primeros al haberse lavado y secado.
Eran bastante caros y no tenían presencia.
Hoy solo los encontramos laminados, también en bandejitas de porespan pero sucios, es decir con tierra.
¿Cómo lavarlos entonces?
Pues aunque no sea nada recomendable hay que lavarlos en la pila y con bastante agua, con lo que se encharcan y luego, por mucho que los sequemos, siempre les quedará bastante humedad y al cocinarlos saldrán más oscurecidos.
He probado hasta a centrifugarlos como hacemos con las lechugas, pero tampoco es la solución.
Así que la conclusión que he sacado es que tardo más en lavar estos champiñones laminados que en limpiar los enteros, lavarlos, secarlos y filetearlos después, y me quedan mucho mejor.
3. En esta receta solo relleno los champiñones con jamón picadito, pero están más ricos añadiendo un picadito de ajo y perejil.
Los tenéis también con video en mi blog.
4. Veis que os explico cómo retirar el germen del ajo.
En aquella época todavía yo pensaba, como siempre se había dicho, que este germen era el responsable de que el ajo repitiese.
Ya no lo quito, me ahorro un paso, y para mí, si tiene que repetir, lo hace con y sin germen.
5. Ya no hago nunca los champiñones al ajillo en una sartén.
He comprobado que salen exactamente igual si se fríen en la olla, o en la olla-sartén.
Me salpican menos al ser la olla más alta que la clásica sartén y casi no mancho nada, y eso que la que se ve en el vídeo era entonces de las más altas que había.
6. Tampoco hoy descongelo en el microondas, como se ve en el vídeo, después de todas las noticias que han ido apareciendo en estos últimos años sobre el Bisfenol A o BPA.
Cuando tengo que descongelar rápidamente algo cocinado que saco del congelador, o dejo el tupper unos minutos a temperatura ambiente, o tal como está, es decir bien tapado, le paso un poco de agua caliente por fuera hasta que todo su contenido se despega de las paredes, es decir, se desmolda como si fuera un bloque sólido entero.
Entonces lo vuelco en un plato y lo descongelo a 300 o 350 vatios de potencia.
7. Tampoco echo nunca nata líquida ni leche al batido de huevos con los que voy a elaborar unos huevos revueltos, porque son «cosas» que siempre se han hecho pero que no tienen sentido.
¡Y añadimos calorías tontamente!
Para que unos huevos revueltos salgan en su punto, es decir algo «churretosos», hay que removerlos contantemente y servirlos en cuanto están cuajados pero jugosos.
Aunque el fuego esté apagado, si se abandonan en la sartén tan solo un momento, con el calor residual que le queda a la misma se cuajarán demasiado y aparecerán forzosamente resecos y apelmazados.
Y quedan muy bien, aunque hay que estar más pendientes, cuajados en el microondas y removiéndolos continuamente.
No se gana ni en tiempo, ni en calidad, pero para 1 o 2 personas puede compensar porque no se mancha ni la sartén.
Y si los champiñones ya se han cocinado previamente en el microondas, cuajamos los huevos en el mismo recipiente sin necesidad de ensuciar ninguno más.
8. Si queréis ver cómo limpiar los champiñones, secarlos y cocinarlos rellenos en el microondas, volved a ver este vídeo que ya está colgado en mi blog.
Me encantan los champiñones de todas formas.
Yo siempre les echo,como también dices, ajo y perejil. Incluso a los rellenos.
Nunca los he hecho al microondas, pero veo que quedan bien.
En los cuajados tienes mucha razón. Yo jamás les pongo nata, si acaso algo de leche desnatada; apago la vitro y con el calor residual se hacen estupendamente.
Nunca he hecho revueltos en el microondas, me da la impresión que se van a cuajar mucho y de todas formas cuajar en la sartén es igual de rápido.
No es por tiempo, es para ahorrarme la sartén!
Como más me gustan es al ajillo. Se tarda poco, no se desaprovecha nada y están muy ricos.
Al microondas, por cierto.