Las bayas de Goji son un tipo de fruto silvestre de color rojizo que se encuentra en el interior de China, en la cordillera del Himalaya,Tibet y Mongolia.
En el mercado europeo las encontramos desecadas, como si fueran uvas pasas, de un color rojo intenso.
Su sabor se sitúa entre el arándano y la cereza, aunque algo amargo.
Se decía que estas bayas eran la panacea pues contenían aminoácidos, oligoelementos como calcio, zinc, hierro, cobre, germanio, proteínas, carotenoides antioxidantes, vitamina C, ácidos grasos esenciales como los omega 3 y 6, polisacáridos, flavonoides como la luteína y la zeaxantina… y la fantástica publicidad que se hizo de ellas les achacaba propiedades casi milagrosas como que:
♦ disminuían la fatiga,
♦ aumentaban nuestro nivel de energía,
♦ protegían nuestra vista,
♦ prevenían enfermedades cardiovasculares,
♦ disminuían la presión arterial,
♦ impedían que el colesterol se oxidara,
♦ cuidaban nuestro sistema inmunológico o nuestras defensas,
♦ podían mejorar problemas de próstata,
♦ mantenían una buena salud general…
♦ y por ello hasta las recomendaban para pacientes con cáncer que recibían o habían recibido quimio o radioterapia,
♦ se les atribuía el poder de equilibrar los niveles de glucosa o azúcar en sangre a la vez haciendo más eficaz nuestra secreción de insulina y por tanto ideal en casos leves de diabetes y personas con síndrome metabólico,
♦ también tenían un efecto tonificante y podían aumentar en algunas personas la libido o deseo sexual.
♦ ¡Hasta podían favorecer la pérdida de peso, porque disminuían la ansiedad por la comida, se quemaban de un modo más eficaz las grasas en lugar de depositarse principalmente en la zona abdominal!
Con tantas maravillas su popularidad comenzó en los foros naturistas de Internet y su difusión boca a boca fue fulminante y en poco tiempo los herbolarios y hasta las fruterías y supermercados se llenaron de paquetes de estas bayas.
Con tanta publicidad su consumo se extendió rápida y fuertemente, se pusieron de moda y se llegaron a pagar de media unos 24 euros el kilo para disfrutar de estas milagrosas bayas.
Pero, ¿qué pasó?
Ahora, ¿quién sigue tomando estas bayas para estar bien?
♦ En el mismo año de euforia por estas bayas la OCU publicó los resultados de un estudio que realizaron analizando una selección de 10 muestras de bayas de Goji en Barcelona y Madrid.
Las muestras analizadas no cumplían los requisitos para su comercialización, contenían gran cantidad de pesticidas, algunos de ellos ilegales en Europa, y también metales pesados como mercurio, plomo, cromo y cadmio.
Se detectaron 13 pesticidas en estas muestras de los cuales 3 no estaban autorizados en la Unión Europea, y podían provocar, entre otros efectos, irritación del tracto respiratorio, a nivel de la piel, alteraciones endocrinas, etc.
♦ Es cierto que deberían tomarse kilos de bayas para sufrir una intoxicación aguda y que sus efectos desconocidos serían, sobretodo, a largo plazo, pero el peligro ya estaba allí.
♦ Así pues, con la misma rapidez con la que se popularizó la fama de las bayas, desaparecieron de nuestra vida cotidiana, aunque parece ser que el estudio de la OCU tampoco fue todo lo riguroso que debía.
♦ Y el caso de las bayas de Goji no es único.
¿Cuántos productos alimentarios «saludables» se han puesto de moda y se han esfumado?
¿Cuántos aparecen cada día?
Con más propiedades a nivel de antioxidantes que estas bayas, mucho más ricas y baratas tenemos nuestras uvas pasas de toda la vida, las pasas de Málaga, ¡y son nuestras!
♦ ¿Por qué nos enganchamos a los nuevos productos de moda tan ciegamente?
♦ ¿La culpa la tienen solamente el marketing y la publicidad?
♦ ¿Por qué «tragamos» todo lo que nos ofrecen sin cuestionar dónde está la intención y cuál es la información adecuada?
Detengámonos a pensar un poco.
Si realmente nos importa nuestra salud, nos debería importar conocer la información real sobre las cosas que consumimos.
Todo esto se puede hacer extensivo a cantidad de utensilios o “ayudantes” de cocina que con una publicidad magistral en Internet atraen la atención de miles y miles de personas que los adquieren, los prueban y comprueban que del “dicho al hecho” va un largo trecho.¡Y acaban arrinconándolos!
En Internet está todo, todo lo bueno, pero también todo lo malo y hay que saber discernir, y como no se puede saber de todo hay que informarse en fuentes fidedignas y de verdadero prestigio antes de adquirir cualquier cosa.
Carme dice
Felicidades por el post !!!! Me pregunto porqué las personas necesitamos siempre «novedades» creyéndonos siempre que lo nuevo es lo mejor.
Supongo que el màrqueting, la publicidad y la prensa tendrá bastante que ver con ésto… pero, aun estando en alerta, siempre acabamos cayendo en la trampa.
Felix Maocho dice
Muy buena reflexión Cristina y muy oportuna, ahora que a lo «natural», se el pone un halo de conveniente que nos ciega el uso de la razón.
Se nos han olvidado la crisis de los «pepinillos ecológicos» que intoxicaron a Alemania, Cierto es, que gracias a Dios, porque podía haber sido ellos, no fueron pepinillos españoles, pero lo cierto es, que una grave intoxicación alimentaria llegó al mercado alemán a través de «productos ecológicos», porque pese a ser natural, no todo lo da la naturaleza es sano, y menos lo que da con «ayuda del hombre» la cicuta es «natural» 100% y no es sana, Todos los años se producen un elevado número intoxicaciones alimentarias como la salmonelosis, no especialmente graves, que no llegan por ello a los periódicos y muchas de ellas a través de alimetos naturales, indebidamente cultivado o elaborado. A ver cuando se entera la gente.
Escribí entonces un post que sigue teniendo vigencia actualmente. http://felixmaocho.wordpress.com/2011/05/30/huerto-familiar-los-pepinos-ecologicos-contaminados-de-alemania/
Cristina Galiano dice
Somos Felix, por si no lo recuerdas, el primer productor de Europa de productos ecológicos, aunque aquí se consumen poco, y precisamente Alemania es el primer consumidor.
Gracias por tu post 🙂
Josefina dice
Buenos días Cristina, supongo recuerdas quien soy.
Totalmente de acuerdo contigo en relación a las famosas Bayas que sigues encontrando en herbolarias y grandes supermercados como el C.I.
Yo no solo uso las pasas (sin pepitas), también añado a las ensaladas arándanos secos que como tienen una ligera acidez y me gustan mucho.
Gracias por todas tus ayudas
Cristina Galiano dice
Ya sé quién eres porque me «suena» tu apellido. Gracias por tu aportación 🙂
angeles dice
Afortunadamente soy muy reacia a comprar todas estas novedades que salen en el mercado. A mi me encantan los frutos secos y soy una gran consumidora de ellos ya que todos los días los tomo. Hasta la fecha como en la analítica anual que hago me sale todo bien nunca tomo este tipo de productos»milagrosos».
Raimon dice
Hola Cristina,
Me encanta tu blog. Es cierto que en Internet se encuentra todo lo bueno y también todo lo malo, por lo que cada día es más importante buscar realmente nuestra propia verdad y aumentar nuestra responsabilidad.
Pienso que este fruto, no es «milagroso», es un FRUTO, que como otros muchos que nos ofrece la naturaleza, tiene muchos principios activos (no se si más o menos que otros) muy interesantes para mantener la salud.
Cuando la OCU hizo la petición que comentas yo las tomaba y al día de hoy las sigo tomando pues entre otras cosas desde la AESAN me remitieron a esto:
http://www.aesan.msps.es/AESAN/web/notas_prensa/bayas_goji.shtml
Una cosa es cierta, cientos de periódicos nos alarmaron con la noticia pero muy pocos publicaron el anterior comunicado posterior. Casualidad o no, como dije anteriormente, que cada uno piense por si mismo y saque sus propias conclusiones. Y si alguno de tus lectores quiere saber si hay estudios científicos publicados sobre un fruto, principio activo, etc. puede visitar la web http://www.pubmed.gov que es a mi entender una fuente de información veraz.
Cristina Galiano dice
Gracias por tu aportación.
Independientemente de la alarma creada por la Ocu, que como he puesto no fue del todo rigurosa, yo me quedo con nuestras maravillosas pasas de Málaga. 🙂
Raimon dice
De nada Cristina,
Desde luego que no hay nada que tenga el sabor de nuestras pasas!!!
Pues a tomar pasas, bayas de goji y todo lo que nos aporte NUTRIENTES beneficiosos para nuestra salud. Un saludo
NATI dice
Hola Cristina, yo las compraba pero a partir de ahora no las consumiré. Pues aunque las retiraron del mercado y volvieron, me pregunto
¿ DONDE ESTAN LOS CONTROLES DE LA ORGANIZACION MUNDIAL DE LA SALUD ? SI UN PRODUCTO NO ES APTO PARA SU CONSUMO.
TE FELICITO POR ESTE BLOG TAN INTERESANTE QUE NOS AAYUDA A REFLEXIONAR
MIL disculpas por escribir en mayúscula. me di cuenta ahora
GRACIAS
NATI
Rosi dice
Un buen dato lo de las vayas goji, a tener encuentra.
Hoy para cenar le añadiré unas pasas a la ensalada y trocitos de manzana, que a los niños les encanta.
Ya te contaré los resultados.
Un fuerte abrazo.
Carmen Sebastián dice
Querida Cristina, gracias por tus posts cada uno de ellos más interesante que el anterior. Me ha encantado tu reflexión sobre las novedades e internet. Tienes toda la razón. Continúa haciendonos participes de tus conocimientos, no me canso nunca de escucharte o leerte y bien sabes que llevo años haciendolo. Todo mi cariño y admiración. Maica
Cristina Galiano dice
Un abrazo Maika 🙂 🙂