Aunque ya hablé hace un par de años del abdomen o tripa aumentados, dado que los casos siguen creciendo y además a edades cada vez más tempranas, creo que merece la pena volver a insistir en este tema.
Hasta ahora para conocer la cantidad de kilos de más que tenía una persona se acudía a calcular el Índice de Masa Corporal o IMC.
Desde hace ya bastante tiempo los médicos se están fijando más en el diámetro de la cintura, aunque el IMC no sea demasiado elevado, ya que la grasa que se localiza en esta zona es más peligrosa que la que se sitúa en brazos, muslos, caderas…
Esta grasa abdominal o visceral llamada también obesidad abdominal se observaba hace años más en los hombres que en las mujeres y por ello se llamaba obesidad androide o en forma de manzana, mientras que la que se acumulaba en las mujeres en muslos y caderas se llama ginoide o en forma de pera, las famosas cartucheras.
Pero hoy las cosas han cambiado y la mayoría de hombres y mujeres, a partir de una cierta edad, y cada vez más jóvenes, acumulan grasa en esta zona central de la tripa o estómago formando lo que se llaman michelines o flotadores.
Y una vez que aparecen, si no se toman medidas inmediatamente, a medida que pasan los años irán aumentando de tamaño paulatinamente.
Para medir esta cintura hay tan solo que coger una cinta métrica, blandita, es decir de las usadas para coser, y medir la circunferencia de la cintura pasando justo por encima del ombligo, en la propia cintura.
La Sociedad Española de Cardiología considera que las cifras normales de este perímetro abdominal deberían estar por debajo de los 88 centímetros para las mujeres y por debajo de los 102 para los hombres.
Superando estas cifras se entra ya en zonas de peligro, con una gran predisposición a padecer enfermedades cardiovasculares, la primera causa de muerte en nuestro país y en los países industrializados por delante del cáncer… que a todo el mundo horroriza.
Las cifras que se barajan para medir esta obesidad abdominal van cambiando a medida que se van viendo los estragos que produce esta acumulación de grasa, y ciertos cardiólogos como Valentín Fuster consideran como peligrosas cifras de más de 80 centímetros en las mujeres y más de 100 en los hombres.
Muchas jóvenes que por muchos motivos, entre otros laborales, porque en España hoy por hoy es casi imposible compaginar el trabajo fuera de casa con la maternidad, retrasan ese episodio tan importante de la vida y, después de dar a luz se quedan ya con algunos kilos de más, precisamente localizados en esta zona.
A muchas no les preocupa, y con la llegada del bebé, prácticamente no les queda tiempo libre para nada, y menos para ocuparse un poco de ellas.
Pero es en esa época, justo después del parto, cuando es el mejor momento para quitárselos de encima sin hacer ninguna clase de dieta, y mucho menos si están lactando, que es lo mejor para la salud futura del bebé, pero es una heroicidad más que se les va a pedir.
Para las que se hayan mantenido activas físicamente durante el embarazo, será mucho más fácil que para las que han estado sedentarias ya que, de alguna manera su cuerpo les “pide” ejercicio.
A las que no están acostumbradas a moverse y que puede que hayan cogido en el embarazo 15 o 20 kilos, algo que se debería haber remediado en su día, les costará mucho más, porque su cuerpo ya está acostumbrado a llevar a cuestas esa «mochila» tan pesada.
Si no se van quitando poco a poco estos kilos de más, acumulados en la cintura, a medida que pasen los meses les será más difícil, primero porque se tendrán que incorporar al trabajo y segundo porque el bebé cada día necesita más cuidados y más tiempo de dedicación, por mucho que lo lleven a la guardería o que los abuelos se puedan ocupar de él y seguirán teniendo poco tiempo libre… o ninguno.
Otra época muy mala para empezar a sumar kilos, y siempre será en esa zona, será alrededor de la menopausia, tanto si es normal como inducida, provocada por una quimioterapia o una operación.
Y simplemente comiendo menos, algo que nunca debéis hacer si estáis lactando, no perderéis peso.
Hoy más que nunca, si se lleva una vida sedentaria, por mucho que se disminuyan las calorías ingeridas, no será bastante.
Y Andar, como todavía se recomienda, no es suficiente para eliminar esta grasa localizada, es un buen ejercicio porque quién mueve las piernas mueve el corazón, pero para deshacerse de esta grasa hay que hacer algo más.
No hay alimentos buenos ni alimentos malos, ni mucho menos tóxicos como todavía algunos nos pretenden convencer.
Hay alimentos que tienen pocas calorías y otros que tienen muchas, y hay preparaciones culinarias que tienen muchas como los fritos, rebozados, empanados, tempuras…, y hay otros muchos guisos tradicionales que, si se elaboran con las técnicas culinarias modernas, requieren poca cantidad de aceite en su preparación, y si se les elimina previamente y en crudo toda la grasa que acompaña a las carnes y aves antes de cocinarlas, claro que se podrá adelgazar con ellos, siempre que se tomen cantidades normales.
Pero todavía se utiliza la palabra dieta, que ya sabéis los que me seguís que odio profundamente, porque me parece en general una engañifa y una estafa.
¡Hay maneras correctas y saludables de comer o alimentarse, y hay maneras también adecuadas de cocinar… pero de éstas nadie habla!
Y sin embargo hoy es tan importante saber elegir nuestros alimentos como manipularlos y cocinarlos correctamente.
¡Me encantaría saber si hay algo en YouTube, en algún libro, en algún restaurant o en algún medio de comunicación que hable de una manera correcta de cocinar!
Contármelo, por favor, si lo encontráis.
Aunque muchos se empeñen y estén convencidos de ello, cuando se van cumpliendo años no hay por qué engordar si se come únicamente lo que nuestro organismo necesita, comiendo de todo, sin privarse de nada… pero en la proporción adecuada.
Otra cosa es que la mayoría de personas lo acepten como normal e irremediable.
Hay que llevar un estilo de vida saludable desde pequeños, o por lo menos desde que os emancipáis y empezáis a vivir vuestra vida.
Si seguís las costumbres de vuestros padres y éstos tienen kilos de más, tenéis el 90% de probabilidades de ir cogiendo kilos a medida que cumpláis años.
Y vuelvo a nombrar a Valentín Fuster, que ya en el año 2012 afirmó rotundamente, “Nadie está condenado genéticamente a sufrir una enfermedad cardiovascular si apuesta por hábitos saludables de vida”.
O a Luis Rojas Marcos que, a sus 70 años como el anterior, se mantiene con su peso normal, y da gusto verle, parece un chavalín, porque a pesar de su pelo frondoso blanco, sigue manteniendo su pinta estupenda de siempre.
Ya lo he repetido hasta la saciedad, no pesan los años, pesan los kilos… ¡y de qué manera!
Pero muchos se abandonan, se van conformando con los kilos que van cogiendo, y “están enfermando» aunque ellos de momento, ni lo noten ni se quieran dar cuenta.
No es un problema estético, os lo aseguro, es un problema grave de salud, aunque a una gran mayoría, no le importe.
Van notando como estos kilos de más merman su calidad de vida poco a poco, sus facultades no solo físicas sino mentales van disminuyendo, se les empiezan a olvidar muchas cosas, tienen cada día más dificultades a la hora de moverse, de andar, de abrocharse simplemente los cordones de los zapatos o de calzárselos… pero no les preocupa.
Como los kilos de más, y ya lo he dicho en más de una ocasión, son la entrada de muchas enfermedades, de todas o casi todas, creo que desde los estamentos oficiales no se les está dando la atención que merecen, es como si todavía no fueran conscientes del problema actual que ya tenemos, y las campañas que se han montado al respecto han servido de muy poco, mejor dicho para nada, ya que las cifras del sobrepeso y la obesidad siguen creciendo no solo en los niños, sino en los adolescentes y adultos y, a partir de los 50-55 años es una verdadera plaga.
Como de momento no hay ninguna píldora milagrosa, la única solución verdaderamente eficaz para contrarrestar esta tendencia es cambiar de hábitos de vida y moverse para quemar lo que se come, sea mucho o poco.
O se toman medidas eficaces, o nuestro sistema sanitario explotará tarde o temprano.
No hay más que visitar un centro de salud o un gran hospital para comprobar el panorama.
¡Y creo sinceramente que los farmacéuticos, como profesionales de la salud, estamos también involucrados!
alba dice
Mucha razón!!
María dice
Pues yo soy bastante delgada y sin embargo estoy dentro de las medidas de abdomen pero tampoco estoy lejos 🙁
yo soy delgada, y tengo 65 anos pero me operaron de corazón hace4 años u luego hace uno de una prótesis de rodilla, y tengo bastanr,te abdomen.cosa en en la vida incluso mayor he tenido dice
no se que hacer, por lo que te he dcho antes.
Cristina Galiano dice
¿Qué pesas y qué mides?
Deberías hacer algún tipo de ejercicio, siempre que tu médico te indique cuál puedes hacer.
laika dice
Si quieres puedes buscar al Dr Ramón de Cangas, yo me puse a «dieta» con él y estoy encantada no tengo nada prohibido, todo está permitido en su justa medida y sin grasas. Me encanta tu página.
Eva Maria dice
Hola Cristina, estoy encantada de haber encontrado este hilo para hacerte una consulta. En un año he engordado 7 Kilos, se ha juntado la operación de una hernia discal y la menopausia, el caso es que siempre he estafo delgada, como a mi me gusta y ahora me veo estar perdiendo la cintura y tengo mucha celulitis, hasta las rodillas están deformes. 84 mide la cintura, 109 la cadera. Mido 1’65 y mi peso está ahora en 65 kilos. Ya puedo caminar y he comenzado a ir al gimnasio. Procuro no tomar leche de vaca, todo a la plancha y verdura y ensaladas, tres veces por semana legumbre, y arroz integral. En el libro adelgazar sin dietas encontraré algún consejo???
Muchas gracias.
Cristina Galiano dice
No entiendo Eva María por qué dices… “Procuro no tomar leche de vaca…” creyéndote lo que muchos desaprensivos que pululan por Internet afirman!
En mi último ebook vas a encontrar muchísimos consejos, no solo alguno , ya que hay que tomar muchas más “cosas” de las que tú tomas.
Puedes ojear sus primeras páginas aquí
https://www.dropbox.com/s/k2e8dcfp25gk86b/LIBRO%209%20-%20PRIMERAS%20P%C3%81GINAS%20CON%20PR%C3%93LOGO.pdf?dl=0
Eva Maria dice
Gracias Cristina, este libro solo esta en formato digital?
Cristina Galiano dice
De momento solo está en versión digital, formato Kindle, y pdf + epub, pero puede que esté dentro de unos meses. Ya os mantendré informados.
keiry cortez dice
cuando publicara su libro para poderlo leer
Cristina Galiano dice
Si te refieres a mi ebook «Como adelgazar si dietas y no volver a engordar» ya lo puedes adquirir en
https://www.bubok.es/libros/246308/Como-adelagazar-sin-dietas-y-no-volver-a-engordar.
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