Microbiota, ¿por qué es tan importante la calidad de lo que comemos?
Cada día se le está dando más importancia a la microbiota, microflora o flora intestinal que es el conjunto de microorganismos que tenemos en nuestro aparato digestivo.
Está formada por 100 billones de bacterias, una cifra 10 veces superior al número de células totales de nuestro cuerpo.
Al hablar de nuestra flora intestinal se puede afirmar que “somos lo que comemos», ya que cuando nos alimentamos se «alimentan» también estos billones de bacterias que pueden llegar a pesar hasta 2 kilos.
En esta «revolución» que hay ahora mismo sobre la nutrición muchos afirman, erróneamente, que no somos lo que comemos, cuando esto se ha dicho desde la antigüedad, aunque entonces se desconocía la importancia de esta microbiota.
Como nuestra alimentación desempeña un papel fundamental en el correcto funcionamiento de nuestra microbiota y en su diversidad, es fundamental llevar una dieta variada, equilibrada, nutritiva y de calidad.
El mal uso de medicamentos, los antibióticos y los pesticidas tienen efectos adversos en nuestra microbiota intestinal.
El médico y biólogo estadounidense Jeffrey Gordon, investigador de la Universidad de Washington en San Luis, descubrió que la flora bacteriana, es decir esta microbiota, desempeñaba un papel crucial en la salud humana.
Afirmaba que unos buenos hábitos de vida, una dieta rica en fibra y en hidratos de carbono de absorción lenta la favorecían, y la falta de ejercicio, es decir el sedentarismo actual, las terapias contra la obesidad y hasta el cáncer la perjudicaban.
Estas bacterias del intestino segregan incluso moléculas que afectan al desarrollo y al estado del cerebro, y por lo tanto pueden influir en la evolución de enfermedades neurodegenerativas, en la salud mental y en el comportamiento humano.
Por ello a la microbiota se la denomina también segundo cerebro.
También se conocen vínculos entre enfermedades gastrointestinales y condiciones psiquiátricas como el autismo, la ansiedad o la depresión.
Asimismo los microorganismos del intestino tienen un papel central en enfermedades como la obesidad, la diabetes o la enfermedad inflamatoria intestinal.
Los prebióticos y los probióticos son dos de los elementos más estudiados en el ámbito de la microbiota intestinal.
Los prebióticos son ingredientes no digeribles que se encuentran en nuestros alimentos que estimulan el crecimiento o la actividad de las bacterias ventajosas para nuestro organismo.
También inhiben numerosas bacterias infecciosas, las responsables, por ejemplo, de intoxicaciones alimentarias.
A diferencia de los probióticos, se trata de sustancias “sin vida” porque no contienen microorganismos vivos, como comprobaremos más adelante.
Entre los muchos alimentos con prebióticos tenemos las alcachofas, la achicoria, el plátano… que contienen inulina, un prebiótico natural.
Las legumbres, la patata y el boniato… que poseen rafinosa y estaquiosa.
El ajo, la cebolla y el puerro… que poseen derivados de la inulina y fructooligosacáridos.
El trigo, la avena y la cebada que también poseen inulina, y los espárragos fructooligosacáridos.
Los probióticos son, según la Organización Mundial de la Salud, OMS, microorganismos vivos que, administrados en cantidades adecuadas, nos producen beneficios ya que promueven el desarrollo de bacterias “buenas”como el Lactobacillus acidofilus y el Bifidus entre otras.
De esta manera, ayudan a restituir la flora intestinal cuando ha sido alterada y a reforzar nuestro sistema inmunológico.
En una alimentación equilibrada, rica en vegetales y pobre en grasas saturadas, la presencia de probióticos y prebióticos está más que asegurada. Y si los consumimos de forma habitual, nuestra flora intestinal y nuestra salud nos lo agradecerán,
Por ello es tan importante la calidad de todo lo que comemos.
Los estudios sobre la microbiota acaban de empezar, pero en un futuro no muy lejano la microbiota se empleará como herramienta terapéutica.
Mientras tanto, como todo lo que se genera alrededor de nuestra alimentación y sobre todo de la Industria Alimentaria, la engañifa estará a la orden del día.
La OCU habla continuamente de alimentos con una buena relación precio-calidad, cuando un alimento es bueno, regular o simplemente malo, sin más rodeos.
Si no se puede adquirir un alimento de primera categoría por impedimento económico, siempre se podrá disfrutar de él en una menor cantidad, como siempre os aconsejo.
¡Más vale poco y bueno que mucho malo!
Hace unos años, no tantos, muchos médicos aconsejaban no consumir productos alimenticios con más de 3 aditivos, puesto que éstos, añadidos no en gran cantidad, que está limitada, pero sí muy variados, consiguen un sabor más intenso y más rico partiendo de una materia prima de poca calidad.
Hay alguna cadena de supermercados que se caracteriza precisamente por esto. Una gran parte de sus productos alimenticios son ricos al paladar, baratos y plagados de aditivos.
¡Y como la tripa no tiene cristales…
¡La próxima trampa, para cobrarnos más, será tener que comprar alimentos ecológicos para encontrar calidad!
En un hotel de lujo de Madrid, en pleno centro polucionado, de cuyo nombre no quiero acordarme, han creado en su terraza, una pequeña huerta cuyos productos recolectados de temporada, siempre son frescos, sin pesticidas, ni aditivos…, son ecológicos.
Como el microbioma humano es el conjunto de genes de esta microbiota, ya se están ofreciendo tests de microbioma que analizan el ADN de estos microorganismos de nuestro intestino para detectar posibles alteraciones.
Según los resultados obtenidos de estos tests, se recomendarán soluciones «especiales» de nutrición para recuperar una microbiota adecuada y que nos sintamos mejor.
Mientras no se hagan estudios científicos más en profundidad, lo más prudente será esperar, aunque el negocio está servido…
flor dice
Buenos dias: he nacido en un pueblo de montaña y procuro por el verano si otras obligaciones no me lo impiden ir a pasar una temporada en el. Que os voy a decir del aire ,puro no purismo. Hasta que se metan con algún que otro ganadero y nos digan que sus vacas contaminan. A lo que voy cuando puedo tengo un pequeño huerto donde siembra mis patatas y alguna que otra verdura, al ser de montaña todo es más tardío. Cuando recolectores mis patatas,no son como las que venden ecologicas,perfectas,están no llevan nada químico nada química ni sulfatos y claro si piel es muy diferente,y que os voy a decir de sabor. No nos dejemos engañar
Cristina Galiano dice
Tienes un TESORO Flor, qué suerte!!!!
Ester dice
Hola Cristina, te supongo al tanto del estudio PREDIMED dónde aconsejan tomar legumbres al menos tres veces por semana . Tu siempre has considerado que había que tomar menos por ser un alimento muy calórico ¿qué opinas ahora? como crees que podríamos incrementar su consumo ¿en sustitución de la carne roja? en pequeñas cantidades? Saludos y muchas gracias
Cristina Galiano dice
Sigo pensando lo mismo Esther porque conozco personalmente, desde hace años, al DR.RAMÓN ESTRUCH que también intervino en el estudio PREDIMED.
Las legumbres son muy buenas pero muy calóricas y por ello, entre otras cosas, la población española sigue engordando. 1 de cada 3 niños y más del 60% de la población tienen sobrepeso u obesidad.
Yo tomo muy poca carne roja, y ni un solo procesado, pero hay muchas otras proteínas, carnes blancas, pescados, huevos, lácteos….
Pero ahora también se están cuestionando los lácteos, es de locos!!!!
cris dice
Y lo más importante de todo es que no sólo hay microbiota en el intestino, también la hay en otras partes del cuerpo y no sabemos ni la mitad de la mitad de su importancia, sólo un ejemplo: los estudios que hay en bebes prematuros que al no pasar por el canal de parto de su madre «pierden» la protección que esta le puede ofrecer, los casos de aborto de repetición o los casos de mastitis que pueden evitarse o solucionarse, no soy médico, ni investigadora, pero el campo es muy amplio, la importancia en nuestra vida brutal lo mismo que su desconocimiento.Sólo comentar que los probioticos, a día de hoy, están considerados «complementos alimenticios» y no tienen que «demostrar» ninguno de los beneficios que indican en su prospecto, esperemos que esto vaya cambiando con el paso del tiempo, la evolución de las investigaciones y la legislación.En cuanto a las legumbres, no voy a discutir si son muy calóricas o no, pero sólo voy a decir que además de tocino, chorizo o productos similares se pueden acompañar de verduras, que muchas veces pagan justos (las legumbres) por pecadores (el compango de turno).Un saludo.
Cristina Galiano dice
Nos esperan Cris grandes cambios… y grandes negocios, grandísimos!!!
María dice
Siempre me pregunto qué diría Cristina Galiano si viese el mensaje de este cartel que
tenemos encima de los microondas en los espacios comunes de nuestra
oficina (un edificio con muchas oficinas que comparten
espacios comunes para comer en cada planta). El cartel dice: «AVISO PARA MICROONDAS: Por favor, no calentar productos con olores fuertes (pescado y verduras). Ayúdanos para que todos podamos disfrutar del espacio. ¡Mil gracias! Community Team» Teniendo en cuenta lo importante que es una alimentación variada, ¿no parece un cartel injusto hacia las personas que intentan cuidar su salud y alimentarse bien, aun encima en una época y en un contexto laboral en el que las empresas cada vez más intentan promover hábitos de salud para sus trabajadores? Además, especifican pescado y verduras…, es muy decepcionante, y yo, la verdad, es que no hago caso, pero el mensaje me parece bastante contraproducente para quien haga caso.
Cristina Galiano dice
Las verduras y los pescados, en realidad cualquier guiso, si se supieran calentar en este pequeño electrodoméstico, y ahí radica el problema, que la gente en general, no sabe calentar, no producen olor.
Gracias por tu comentario Maria.
María Pilar Olivares dice
Estimada Cristina, quería darte las gracias por todo lo que me has ayudado con tus publicaciones y tú saber hacer. Te seguiré leyendo y estaré pendiente de tus comentarios. Probablemente tenga que consultarte alguna duda muy pronto. La práctica a veces No es tan sencilla como la teoría :o) Un abrazo.
M José dice
Buenas tardes. Siempre da la impresión de hacer afirmaciones bien fundamentadas. Estaría muy, muy interesada en saber dónde exactamente a leído que «existen vínculos entre enfermedades gastrointestinales y condiciones psiquiátricas como el autismo» las otras dos que menciona no son de mi competencia. Se lo agradezco de antemano. Un saludo.
Laura dice
Hola Cristina,
He leído sus
consejos sobre las ollas súper rápida; los cuales me parecen muy interesantes y
útiles.
Quiero compra una.
¿Qué marca y modelo me aconseja?
Muchas gracias de
antemano por su ayuda.
Un saludo
Laura