Esta receta de lomo de cerdo con salsa de ajos, aunque es muy sencilla, puede servir perfectamente para navidades para todos los que no quieran «marearse» mucho.
Tranquilos porque no sabe además a ajo.
También sirve, porque es fantástica, para un día en el que os juntáis muchos amigos o familiares ya que se puede «estirar» y escoger una pieza de carne más grande añadiendo también algo más de leche.
Se puede tener ya elaborada con antelación porque se conserva estupendamente en la nevera durante varios días siguiendo las técnicas generales para hacerlo y también congela estupendamente como veremos en los consejos.
Y se calienta en el mismo momento en el que se va a tomar.
La receta sería para 5-6 personas:
■ 4 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
■ 1 kilo de cinta de lomo de cerdo ya limpia, sin grasa exterior
■ sal y pimienta blanca recién molida
■ 1 cabeza entera y bien gorda de ajos sin pelar
■ 1 hoja de laurel
■ 300 g = 3 decilitros de leche entera
Hay que escoger una cinta de lomo de calidad y, aunque a los muy jóvenes os parecerá muy fácil encontrarla, para los que llevamos varios años cocinando, cada día nos resulta más difícil comprar una realmente buena.
En los supermercados en general se suele ver fresca, envasada al vacío en una bolsa fuerte de plástico o dentro de una bandeja de porespan cerrada, pero aunque no esté de»oferta», que a veces lo está, se la ve «nadando» en una especie de agua-jugo sanguinolento nada agradable a la vista que nos alerta de su poca calidad.
Si la adquirís en la sección especial de carnicería, dentro del mismo supermercado, o en una carnicería de un mercado municipal, o en una tienda independiente de barrio… os dará un poco igual.
Mientras no sepamos cómo se ha criado el cerdo, es decir si ha estado siempre en granjas o suelto a ratos en el campo, en cuánto tiempo se le ha cebado y lo que ha comido desde que nació no podremos «adivinar» su calidad, por muy buena «pinta» que tenga.
Una gran parte de los cerdos que adquirimos hoy son explotados y convertidos en máquinas productoras de carne.
Como siempre, para trabajar menos y mejor tener todos los ingredientes preparados, es decir:
1. La cinta ya totalmente limpia.
2. El aceite, la sal y la pimienta, el laurel, la cabeza entera de ajos y la leche.
3. La olla superrápida con sus 2 tapas, la suya de acero y la de cristal.
4. La minipímer y su vaso licuador si se tiene, o un colador
Preparación y elaboración de este lomo de cerdo con salsa de ajos
1. Calentar el aceite en nuestra buena olla superrápida y dorar bien por todas partes la carne sin pincharla.
Durante todo este proceso, como la carne salpica, tapar la olla con su tapa de cristal y solo mancharemos la encimera al darle la vuelta, ver consejos.
2. Cuando esté de un bonito color dorado por todas partes, salpimentarla. Si no coge suficiente color estará como «cocida» y no asada y el resultado no os gustará.
3. Añadir el laurel, la cabeza de ajos entera sin pelar y la leche.
Si la carne se hubiera «pegado» un poquito en el fondo de la olla, porque el fuego estaba muy fuerte, rascar con una cuchara de madera para despegarlo.
4. Tapar la olla ahora con su tapadera de presión y cocinar durante 8 minutos con las dos rayitas de la válvula de presión fuera.
5. Cuando podamos abrir la olla, retirar el lomo y el laurel y triturar la salsa con la minipímer.
Si tenéis un vaso-licuador agujereado como el de la foto, os ahorráis tener que colar esta salsa para eliminar todas las pieles de los ajos.
6. Si queréis conseguir más salsa, añadirle ahora más leche y dejarla evaporar un poco para que espese, cociéndola en este caso con la olla destapada.
Consejos de cocina y nutrición
■ La cinta de lomo tiene fama de ser muy seca, pero os aseguro que si la doráis bien por todas partes, para «cerrar sus poros» y la cocináis después el tiempo indicado, sin pasarlo, os saldrá por dentro rosadita y jugosa.
■ Los carniceros, si se lo pedís, por supuesto después de pesada, os la limpiarán muy bien por fuera quitando toda la grasa «visible», pieles, nervios, tendones…
Aunque ellos siguen diciendo que no hay que quitar esta grasa para que la carne no resulte seca, esta grasa es saturada, es sebo puro sin ningún sabor y lo único que nos aporta son calorías de más y un prejuicio para nuestra salud.
■ Si el fondo difusor de la olla no fuera de muy buena calidad, con 5 capas bien diferenciadas, la carne tapada se cocería y no se doraría. Por ello os he especificado que se necesita una buena olla.
Este fondo difusor en alguna marca es “tipo sándwich”, con 5 capas bien diferenciadas:
– la primera de acero-cromo-níquel,
– la segunda de una aleación de aluminio y silicio,
– la tercera de aluminio, un magnífico conductor del calor,
– la cuarta de otra aleación de aluminio y silicio y
– la quinta de acero cromado, válido para inducción.
■ Podéis congelar este lomo de cerdo cocinado en un solo trozo, mejor que ya cortado, acompañado de su salsa o solo, guardando en otro tupper la salsa sola.
Si ésta, al descongelarla apareciera como «cortada», porque muchas de las leches hoy, aunque sean enteras, son «aguachi», reestructurarla batiéndola unos segundos con la minipímer.
Mañana martes, aunque no «toca» post, sí que publicaré uno sobre la elaboración casera del salmón marinado, ya que la receta que existe del año 2012 necesita un «pequeño arreglo» porque la sal ahumada Costa con la que se preparaba, ya no existe y, si usáis los «preparados de sal para ahumar»que abundan en muchos supermercados tienen muy poco ahumado y no os saldrá rico.
Y estamos en una época en que marinados y ahumados se consumen mucho.