Herramientas imprescindibles para cocinar bien en el microondas
Ya vimos las herramientas mínimas que se necesitaban para cocinar con rapidez, eficacia y comodidad en este post y en este otro.
Ahora le llega el turno al microondas, que muchos todavía lo tienen totalmente infrautilizado y que sin embargo constituye una gran ayuda en la cocina.
No se trata de cocinarlo todo en él, sino solamente lo que sale bueno y con calidad no solo nutricional sino gastronómica.
Los recipientes imprescindibles dependerán de si lo queréis usar mucho, para todo lo que sirve o o poco.
Si solo queréis cocinar primeros, segundos platos o postres sencillos os hará falta muy poquito, tan solo 1 buen recipiente con su tapa correspondiente.
Olvidaros de todos aquellos fabricantes de microondas que dicen«cocción vapor»,«especial vapor»,«vaporeras»… que son únicamente estrategias comerciales y ganas de engañar al consumidor.
El que un alimento se cocine al vapor en el microondas no depende nunca del recipiente utilizado ya que todos los microondas por muy sencillos que sean cocinan de esta manera en cualquier recipiente que tenga una buena tapa, nunca hermética porque «saltaría», pero que encaje bien para que no se evaporen los 12 g de agua por minuto que estas ondas electromagnéticas producen siempre.
Buscar en Internet un recipiente con tapa lo más parecido a éste que veis en mis videos y que era tan bueno y servía para tantas cosas… que, inexplicablemente, dejaron de fabricar y, lo que es más grave todavía, no quieren volver a hacer.
Y como ya tienen “el molde original”, sería lo más fácil del mundo.
Una de dos, o no tienen ni idea de cómo funcionan los microondas, o solo quieren obligar al consumidor a comprar lo que a ellos les interesa, sea útil y eficaz o no lo sea.
¡Todavía nos ofrecen, como alternativa, recipientes de plástico que nunca se deben usar para cocinar en el microondas!
Yo os voy a poner, para que veáis simplemente distintos modelos y formas, una serie de enlaces de lo que he encontrado más parecido o menos malo en Internet, pero seguro que muchos de vosotros conseguís bastantes más, y si los compartís con los demás, ¡ellos y yo os lo agradeceremos!
♦ Os recuerdo que el mejor, como en otros sistemas de cocinado, la olla superrápida por ejemplo, es el que tiene la mayor superficie útil posible y sin embargo poca altura puesto que las microondas solo penetran 2 o 3 centímetros de espesor.
Otro podría ser este, aunque es demasiado hondo, pero si es así ya sabéis que no tenéis que amontonar nunca los alimentos, solo cubrir el fondo con una capa.
Este otro sería ideal porque es muy parecido al mío, pero es muy probable que no os quepa en vuestro microondas.
Después de vistos todos ellos y antes de nada yo os recomendaría que visitarais uno de esos grandes bazares baratos, que esté bien surtido, y en el que podéis encontrar muchos recipientes parecidos de la marca brasileña Marinex…, y a un precio irrisorio.
♦ Si calentáis mucho en el microondas, y yo no no tengo en mi escuela de cocina ni un solo cacito o cazo, os vendrá muy bien 1 jarrita de vidrio que suelen ser también medidoras, y os servirán también para esa función.
Os servirá para calentar toda clase de líquidos, hacer infusiones, caramelo líquido, freír ajitos para el pil-pil, o para la dorada a la espalda, o para calentar agua con lejía para las manchas…
♦ Unas manoplas para sacar del microondas los recipientes calientes, aunque nadie las usa, siendo tan cómodas y prácticas.
Las hay también muy baratas en los grandes bazares
♦ Si en el recipiente que tenéis no os caben 2 pimientos rojos grandes, de 400 gramos cada uno, para asarlos, seguro que tenéis en casa una gran ensaladera que os va a servir para ello, además de para hacer bechamel, mermeladas, natillas…
Si necesitáis taparla, para los pimientos por ejemplo, hacerlo con un plato o una fuente redondas de mayor diámetro, o con una tapa de succión de silicona también más grande. Las hay de muchos diámetros, más pequeñas y más grandes.
♦ La brocha, la espátula de silicona y alguna cuchara de madera de las que ya vimos.
♦ Si no encontráis un pincho o aguja fina para probar si las patatas, la coliflor, las alcachofas están suficientemente blandas, o los bizcochos, usar un palillo de madera.
Si ya vais a animaros y usar el microondas para todo lo que sirve, yo añadiría.
♦ 1 molde alargado de plumcake si hacéis pasteles de carne o de verduras.
Me gustan más los de vidrio porque son transparentes y porque llevan años en el mercado.
♦ Unas flaneritas individuales de silicona, siempre de marca, en las que se puede hacer el caramelo directamente sin que se quemen.
♦ Y si vais a hacer flanes grandes o pasteles de verduras delicados como el de espárragos, setas, espinacas…, un molde redondo de anillo o de rosca llamado también de bavarois de vidrio.
Os recuerdo que estas preparaciones que se suelen hacer al baño María en el horno tradicional, o en la olla superrápida, se hacen estupendamente en el microondas, sin poner nada, solamente trabajando a una potencia algo más baja que la máxima, alrededor de los 500 o 600 vatios.
♦ Un molde redondo de unos 24-26 centímetros de diámetro y 3 o 4 de altura para elaborar bizcochos sencillos en el microondas.
Pintar todo su interior con aceite y una brocha de silicona porque el bizcocho se despegará mejor.
♦ Aunque ya lo he dicho en varios posts, insisto en que para calentar alimentos ya cocinados en el microondas hay que usar siempre una potencia pequeña de 300 o 350 vatios, tapando siempre, por 2 motivos principales:
– para que el plato no se reseque y
– y para que no salpique el interior del microondas.
En este caso y solo en este caso podéis usar las tapas de plástico ya que los tiempos de su uso van a ser muy cortos y a pequeña potencia.
No las uséis nunca para cocinar.
Os invito a que hagáis todos vosotros el siguiente»experimento».
Calentar simplemente un guiso con salsa, albóndigas, calamares, carne guisada… a la potencia baja indicada pero más tiempo del necesario.
Comprobaréis que en los bordes de dicho plato, que es dónde mayor incidencia hay de microondas, la salsa se ha evaporado y aparece el plato reseco.
Esto os indica que por esos agujeros de la tapa, también ha habido una evaporación y por tanto un resecamiento.
Por ello, cuantos menos agujeros tengan, mucho mejor.
Recordar también que el tiempo de calentamiento debe ser el necesario, sin pasarse, y que una manera de comprobarlo es poner la mano en el centro del plato o del recipiente, por debajo. Si está caliente es que ya lo está.