Hoy os propongo un plato único completo para que los niños se lo lleven al cole.
Sirve para todas las edades, tanto con peso normal como con sobrepeso, cambiarán tan solo las cantidades, e incluso para llevárselo los padres a la oficina.
Si se trata solo de 1 niño, se pueden hacer de 1 sola vez 4 o 6 raciones, y las 3 o 5 que sobran separarlas, etiquetarlas y congelarlas para dentro de 3 o 4 semanas.
Este plato irá siempre acompañado de 1 fruta fresca, plátano, manzana y pera bien lavadas para que se las pueda tomar con piel, mandarina fácil de pelar o naranja ya pelada.
Para que no se manche si es demasiado pequeño, separarle bien todos los gajos de la naranja recomponiéndola después y, a continuación, sin demorarse ni un minuto envolverla en varias capas de film transparente e inmediatamente guardarla en la nevera.
Como el problema del tupper en algunas comunidades parece que todavía no está resuelto, y en las que lo está van a llover los problemas a la hora de calentarlos puesto que muchos no saben usar el microondas correctamente, os propongo que en lugar de tupper los peques y no tan peques se lleven la comida de casa ya caliente, cuando se van por la mañana, en un termo especial para sólidos.
Comprarlos de acero inoxidable, a prueba de roturas, y lo suficientemente anchos como para que el niño coma su comida allí, sin tener que trasvasarla a ningún otro recipiente. Si son de buena calidad la comida permanecerá caliente hasta 12 horas.
No es lo ideal puesto que los alimentos no deben permanecer calientes durante mucho tiempo, pero siguiendo todos los pasos que os explico aquí, puede resultar bastante mejor que calentarlos a potencia máxima, como se va a hacer en el cole puesto que no hay tiempo para hacerlo adecuadamente, y las colas que se van a formar, si no hay una buena organización, van a ser descomunales.
¡Importante! Cuando por la mañana vayáis a volcar en el termo la comida, unos minutos antes de que acabéis de calentarla, volcar en él vacío, agua muy caliente y dejarla allí unos minutos para que su interior coja calor. De esta manera la comida os durará caliente muchas más horas.
¡¡Muy importante!! Vais a manipular comida caliente mucho más perecedera que la fría, así que extremar las precauciones tanto a la hora de cocinarla, como de calentarla y volcarla en el termo. Lavaros las manos muy a fondo con agua y jabón.
Os hace falta:
1. Una bolsa o mochila térmica portaalimentos que nos conserve tanto el termo caliente como la fruta fresca fría.
No la compréis demasiado pequeña por si también tenéis que incluir en ella el bocadillo de media mañana y el de la merienda.
Las hay que pesan y ocupan poco y en las que el espacio interior está muy bien aprovechado, incluso algunas, si se quiere, se pueden dividir en 2 compartimentos.
2. 1 termo bueno para sólidos.
3. 1 botellín de agua natural, nada de zumos ni refrescos.
4. 1 cuchara puesto que el plato la necesita y 1 tenedor por si el niño ya está acostumbrado a empujar con una segunda pieza en lugar de con el dedo.
5. 3 o 4 servilletas de papel o de papel absorbente de cocina para evitar que manche o se manche.
6. La fruta.
7. Si está muy acostumbrado al pan, siempre pan de barra y nunca de molde aunque esté más blandito, se le puede incluir en la mochila o dejarlo para la merienda y la cena.
Envolverlo primero en papel absorbente y luego dentro de una bolsa de plástico y nunca en papel de aluminio que no se debería utilizar ya para uso alimentario, aunque se vea por doquier. No es nada recomendable.
8. Añadir también otra bolsa finita de plástico para guardar los cubiertos y servilletas de papel sucios y la piel del plátano o de la mandarina. De esta manera no ensuciará para nada el colegio.
9. Si sois muy pulcros podéis añadir 1 servilleta húmeda envasada para que se limpien bien las manos en lugar de lavarlas por si no les resulta fácil hacerlo.
El plato único de hoy va a ser Lentejas estofadas con pollo y muchas verduras y saldrán 4 o 5 raciones.
■ 250 g de lentejas
■ 1 cabeza entera de ajos sin pelar
■ 150 g de cebolla o cebolleta
■ 100 g de puerro
■ 200 g de pimiento verde
■ 100 g de zanahorias
■ 150 g de patatas
■ 1 hoja de laurel
■ 1 cucharadita de pimentón de La Vera
■ 3 cucharadas de aceite de oliva virgen extra
■ 2 clavos
■ sal y pimienta blanca recién molida
■ 500 g de pechuga de pollo o de pavo
■ agua del remojo para cubrir
1. Poner las lentejas en remojo la noche anterior con agua templada que las cubra bastante para que no se queden secas durante la noche.
2. Al día siguiente volcarlas en una buena olla superrápida con el agua de remojo que las cubra y que sobre solo un dedo.
3. Picar finamente, en la picadora de la minipímer por ejemplo, la cebolla, el puerro, el pimiento y las zanahorias, y las patatas mejor en cubitos, aunque si tenéis poco tiempo también las podéis picar conjuntamente.
4. Añadirlas a las lentejas junto con la cabeza de ajos sin pelar y el resto de los ingredientes menos el pollo.
5. Remover con una cuchara de madera y cocer 2 minutos con las 2 rayitas de la válvula o regulador de presión fuera.
6. Mientras tanto limpiar muy bien la pechuga por si llevara algo de grasa y cortarla en cubos medianos de manera que el niño pueda comerlos de un bocado sin necesidad de cortarlos.
7. Cuando la olla se pueda abrir porque la válvula de presión ha caído por su propio peso, añadir el pollo, remover para que todos los trozos se repartan por igual, tapar ahora la olla con su tapa de cristal, y en cuanto su contenido empiece a cocer de nuevo, apagar porque la pechuga es muy tierna y si se dejara cocer más se resecaría.
8. Volcar inmediatamente en tuppers del tamaño que deseéis, 1 ración, 2…, taparlos a continuación en caliente y seguir todas las instrucciones del post.
9. Si vais a congelar las porciones que no vais a utilizar seguir los pasos explicados.
10. Cuando vayáis a calentar las lentejas, para volcarlas en el termo, éste tiene que estar muy limpio, vuestras manos también y toda la mesa de trabajo.
11. El tupper con las lentejas debe estar en la nevera, porque se ha conservado en ella, o también en la nevera porque se sacó la noche anterior del congelador.
12. Volcar la ración necesaria recién calentada en el termo, taparlo inmediatamente y guardarlo en la mochila.
Ya no se debe abrir hasta que el niño se las vaya a tomar en el cole.
13. Colocar el resto de las cosas en la mochila, sacando la fruta de la nevera en el último momento.
14. Si la mochila se puede dividir en 2 partes, colocar en una el termo y en la otra un gel pack congelado y la fruta que permanecerá fresca hasta el momento de ser consumida. También se puede colocar aquí el pan, y/o los bocadillos.
De esta manera no se produce ninguna manipulación, ni se usa la nevera ni el microondas del colegio, nada.
Si en lugar de pechuga pusiéramos muslos o contra muslos de pollo o de pavo, libres totalmente de grasa, habría que dorarlos previamente, siempre en la olla, y cuando lo estuvieran añadir el resto de los ingredientes encima y cocinar los mismos minutos.
Tendríamos que deshuesarlos después, con la consiguiente pérdida de tiempo.