En este post vamos a hablar de los trucos que podemos usar para tener una vida normal cuando se padece algún tipo de artrosis de mano.
Ya os he explicado en varios posts en qué consiste esta enfermedad degenerativa, cuándo se produce, cómo aliviarla, y cómo detenerla, aunque sea solo en parte ya que, al degenerar el cartílago de las articulaciones, de momento no tiene solución.
¿Quizás dentro de unos años, cuando se hagan más pruebas con las células madre?¿
De momento el «medicamento» que más debería recetarse para que no aumente vertiginosamente cualquier tipo de artrosis es el ejercicio, que nadie quiere hacer alegando que les duele. Pero el órgano que no se ejercita se atrofia, y así, cuanto más inmovilismo, más dolor y menos agilidad.
En el caso de artrosis en las manos, en varios dedos o en el pulgar, que es lo que se llama «rizoartrosis», vamos a ver qué trucos nos podemos «inventar» para poder seguir trabajando de una manera normal, o casi, a pesar del dolor.
Si se tienen las «manos de trapo», protegeros siempre con unos guantes de goma que, más o menos gordos, os servirán para muchas más cosas. Estos guantes dan más capacidad de agarre, es decir que vuestras manos adquieren más fuerza.
Os voy a citar algunos de estos trucos, sobre todo en la cocina.
1. Para abrir cabezas enteras de ajo y pelar sus dientes, colocar cada cabeza encima de la tabla de la cocina, con la parte del tallo hacia arriba, y con un mazo de goma, nunca un martillo con el que haríais puré, romper primero la cabeza, y luego aplastar ligeramente los dientes teniendo mucho cuidado de no daros un mazazo en los dedos.
Al estar rajados se pueden pelar más fácilmente.
2. Para abrir botellas con corcho, como las de vino, hay unos sacacorchos eléctricos sin cable, que van muy bien, y entre ellos hay una gran variedad para escoger.
No solo sacan el corcho, sino que además os lo devuelven ya sacado.
Para estas botellas de vino que se quedan a medio gastar hay unos pequeños artilugios para hacer el vacío en su interior y que el vino pierda el mínimo de propiedades cuando no se consume en una sola vez.
3. Para abrir las botellas de cava o de vinos espumosos hay también sacacorchos, esta vez manuales y tapones también especiales para conservarlos cuando están a medias.
Incluso este set que os acabo de indicar lleva ya el tapón de cierre hermético.
4. Los frascos de mermelada se abren con mucha facilidad con estos abre tarros especiales que os facilitarán la vida.
5. Si estos frascos son de un diámetro diferente, se puede dejar caer, por la tapa, agua muy caliente que produce una dilatación de la misma y así se podrá abrir mejor.
También se puede calentar fuertemente y durante un ratito la tapa con un secador de pelo que también nos producirá una dilatación.
6. Hay ciertos tuppers realmente antipáticos que ajustan tan bien que, a veces, es imposible abrirlos, aun metiendo entre su base y su tapa un destornillador del tamaño adecuado. Si esta operación no se realiza con sumo cuidado, el destornillador se nos puede escapar de las manos y el tupper puede ir deteriorándose.
7. También para abrir ciertas «cosas» se pueden usar unos alicates, que tengan la apertura suficiente par agarrar la tapa, o llaves inglesas cuya apertura también podamos regular.
8. Abrir una olla superrápida, la que yo utilizo por ejemplo, algo que se realiza girando la tapa hacia la derecha, si se la ha dejado enfriar durante cierto tiempo, puede ofrecer cierta resistencia para abrirse.
En estos casos, colocar una bayeta o paño, o simplemente 2 trozos superpuestos de papel absorbente de cocina en las asas, para amortiguar el golpe y no dañarlas, y darle golpecitos con el mazo de los ajos, hasta que dichas asas empiecen a moverse, siempre con mucho cuidado.
9. Hay multitud de «herramientas eléctricas» que pueden facilitar la vida en la cocina, abrelatas, exprimidores, picadoras de verduras… pero hay tantas que antes de hacer la inversión, cercioraos muy mucho de que son eficaces.
10. A la hora de sacar o meter alimentos en la nevera y en el congelador, tendréis que «medir» vuestras fuerzas y sacar menos cantidad de la que acostumbrabais.
Si se cae al suelo algún tupper recién sacado del congelador, por muy bueno que sea y de muy buena marca, es más que probable que se haga añicos.
11. Igualmente, para traer o llevar paquetes, o para hacer la compra, utilizar siempre «ruedas», es decir carritos. Los hay más o menos sofisticados, y hasta con 4 ruedas y no solo 2, que son capaces de subir y bajar escalones con toda comodidad.
Si lo vais a usar a menudo comprar uno de buena calidad para que sea seguro y os dure un cierto tiempo.
Los hay, además, que tienen un bolsillo térmico para transportar congelados o alimentos delicados.
Estos carritos deben siempre empujarse y nunca arrastrarse ya que, en este último caso, se estropeará nuestra espalda.
12. También deberían existir trolleys o maletas pequeñas con ruedas que se pudieran empujar en lugar de arrastrar, sobre todo si se viaja mucho en avión, se lleva solo equipaje de mano que debe tener unas medidas máximas determinadas y un peso también máximo autorizado que puede ser de 10 o 12 kilos.
Lo que he encontrado hasta ahora no es factible porque pesan mucho, pero se admiten sugerencias.
13. En cuanto a los dispositivos que existen para la artrosis de mano pueden ser estas férulas o estas otras, ambas lavables.
Os dan más fuerza en las manos, que es de lo que se trata, y que os duelan menos.
Aunque muchos las recomiendan para dormir, mi opinión es dejar las manos totalmente relajadas durante toda la noche, desde la muñeca hasta la punta de los dedos, sin nada que las oprima. La relajación hace milagros, lo mismo que el ejercicio aunque parezca una paradoja.