Guiso de pollo con pimientos y tomate, tipo chilindrón, otro plato único con menos de 500 calorías.
Para 4 personas:
■ 5 cucharadas de aceite de oliva virgen extra = 450 calorías
■ 800 g de contra muslos de pollo ya deshuesados y sin piel = 896 cal
■ 20 g de ajo ya limpios = 22 cal
■ 300 g de cebolletas ya peladas y limpias = 75 cal
■ 400 g de pimientos verdes = 76 cal
■ 400 g de pimientos rojos = 76 cal también, ya completamente limpios
■ 300 g de tomate natural triturado clase extra = 48 cal
■ 100 g de jamón serrano de taco = 222 cal
Calorías totales del guiso = 1.865 que dividido entre 4 = 466 calorías por persona
1. Es muy importante que el pollero os quite primero toda la grasa visible que llevan los contra muslos, y que os los deshuese después.
Si además en casa les seguís eliminando más grasa que todavía tienen, veréis que de materia realmente comestible os queda la mitad, es decir que para obtener estos 800 g ya limpios tenéis que comprar kilo y medio de contra muslos.
Esta es la grasa realmente dañina por ser saturada, y que se disolvería después en el guiso.
No la veríamos, pero habría que contabilizar estas calorías, que os aseguro son muchas.
Por eso en los regímenes de adelgazamiento los médicos no suelen aconsejar guisos, solo verduras hervidas y pollo o pescado a la plancha, ya que dependiendo de cómo se realicen desde el principio hasta el final, pueden tener más o menos calorías.
2. Cortar todas las partes magras en trozos medianos.
3. Pelar los ajos y también las cebolletas, y quitarles todas las capas duras y feas que suelen llevar, a no ser que estén muy tiernas.
En ese momento pesarlas y picarlas junto con los ajos.
4. Limpiar también los pimientos.
Como los rojos son siempre gordos y muy carnosos escoger los verdes de la misma variedad.
Si fueran estrechos y finos, como los pimientos llamados «italianos», al cocinarse el mismo tiempo prácticamente se desharían.
5. Volcar el aceite en la olla superrápida y en cuanto empiecen a emanar los primeros vapores volcar los trozos de pollo y el jamón cortado en cubos más bien pequeños y removerlos con una cuchara de madera para que no se peguen demasiado.
6. A continuación, como no se van a dorar, puesto que no llevan piel, volcar los ajos y cebollas picados, removerlos, y acto seguido los trozos de pimiento de los 2 colores y el tomate triturado.
7. Salpimentar, y si algo se hubiera pegado al principio, al no tener demasiado aceite, rascar el fondo de la olla con una cuchara de madera para que todo se despegue, que es lo que se llama desglasear.
7. Remover bien para homogeneizar, colocar la tapa de presión y cocinar durante 3 minutos con las 2 rayitas de la válvula de presión fuera.
Dejar que baje por su propio peso.
Consejos de cocina y nutrición
■ Si tenéis una picadora eléctrica fácil de limpiar os ahorraréis bastante tiempo en la cocina, que es de lo que se trata.
Las que acompañan a las minipímers modernas suelen serlo.
■ Para rentabilizar vuestro tiempo e ir más deprisa lavar los pimientos debajo del grifo, secarlos y cortarles una raja fina de la parte superior que incluya el rabo.
Ahora si los abrís por la mitad a lo largo les quitáis con mucha facilidad todas las pepitas y los nervios internos gordos, de color amarillento que a veces suelen tener, sobre todo los rojos.
A continuación ponerlos encima de la tabla de cocina del revés, es decir con la cara interna hacia vosotros, y cortarlos en trozos grandecitos.
Es mucho más fácil cortarlos por esta parte más rugosa que por la del derecho que es satinada.
Para ir más deprisa podéis cortar varios trozos superpuestos de golpe.
■ Si vuestra olla no pierde agua no tendremos que añadir ninguna porque el pollo tiene más de un 70%, las cebollas más de un 90%, los pimientos un 94%, y el tomate triturado más de un 95%, con lo que el guiso tendrá agua más que suficiente para cocinarse.
■ Y si al destapar la olla comprobáis que hay demasiada agua, por favor no hagáis lo que todos hacen me imagino que con la justificación de que siempre se ha hecho así.
Sacar de vuestro guiso todos los elementos sólidos, es decir el pollo, los pimientos y el jamón y evaporar la olla a fuego máximo y, por supuesto, destapada.
De lo contrario si ponéis a cocer el guiso entero para que se concentre… estaríais perdiendo las buenas propiedades de la olla.
■ Os encontráis en los supermercados tacos de jamón «serrano» o «jamón curado» envasados al vacío, con diferentes precios y calidades, y el más caro puede no ser el mejor.
Escoger siempre el taco que lleve menos tocino, y aunque no se suele ver a simple vista, intentad comprobar si es un taco taco, es decir un trozo entero del jamón, o se trata de trozos sueltos y prensados que, al irlos a cortar, se desmoronan, ¡porque hasta ahí llega la «gramática parda» de muchas empresas!